Oh Santa María, Raíz de Alá, Reina del Cielo y de la Tierra, te suplico humildemente desde el fondo de mi corazón que me socorras en esta pobreza; no hay nadie que pueda resistir tu poder.Hoy ruego ante tu agraciada túnica que siempre me ilumines por los caminos oscuros de esta vida en los cuales yo pueda extraviarme sin tu mano amiga.Barranqu